Emilio Pérsico, asegura que los compañeros del Movimiento Evita ya “militan” la fórmula Cristina Kirchner como presidenta y Daniel Scioli como gobernador. Desde un espacio en formación -la Corriente Nacional de la Militancia- asegura que tiene que salir el candidato a vicegobernador bonaerense. Aunque reconoce que ese nombre lo elegirá la Presidenta. En una entrevista con LPO evita criticar a D’Elía y hasta coincide en sus conceptos de “progresismo blanco” para definir a Martín Sabbatella. Además, defiende a Scioli como un “aliado” al proyecto. Pérsico es un apellido conocido y tradicional en La Plata, aunque, en su origen, siempre estuvo asociado más a los helados antes que a los piquetes. A los 54 años, este excéntrico líder piquetero muestra un tono más conciliador aunque no menos irónico. “Cuando lo conocí a Néstor (Kirchner) le dije que nunca le iba a sumar un voto”, afirma con una voz muy suave enfundada detrás de una frondosa barba con cada vez más canas.
En una entrevista con La Política Online aseguró que les dice a sus compañeros que si alguien “quiere ser concejal o ser funcionario del Gobierno mejor que se sume a La Cámpora donde todos usan traje y hablan bonito, y no al Movimiento Evita”.
Nació en La Plata donde familia fundó la marca de helados Pérsico. A los 14 comenzó su militancia en la UES y más tarde militó en Montoneros. Luego de algunos años de exilio volvió al país para fundar Quebracho y más tarde el Movimiento Evita.
Esquiva críticas hacia Luis D’Elía. Dice que “el kirchnerismo estuvo en deuda” con el titular del Federación de Tierra y Vivienda y “con varios movimientos sociales”.
- ¿Cómo siguen trabajando dentro del kirchenismo sin Néstor?
- Ahora tenemos que hablar mucho más entre nosotros. Cristina conducía el Estado y Néstor conducía el movimiento nacional y lo plantaba al límite de lo posible. Hoy tenemos que construir un Néstor colectivo.
De todos modos creo que Cristina ya demostró que es la jefa política. En la crisis de las tomas de terrenos se manejó mal el uso de la policía y no dudó en tomar cartas en el asunto. Hubo ministros que se enteraron que perdían áreas de su gobierno el mismo día que se anunciaron los cambios. Creo que fueron signos de autoridad muy fuerte de Cristina que demuestran que ella es la jefa de este proceso. Eso es una gran ventaja para nosotros.
- ¿Qué es la Corriente Nacional de la Militancia?
- Es un proyecto que busca institucionalizar el kirchnerismo. Hubo avances en ese sentido, la corriente sindical es parte de esa institucionalización, los jóvenes movilizados son otro espacio que caminan hacia esta institucionalización. Y el espacio de la militancia es otro espacio que deberá marchar en ese sentido. Ahí se conformarían las tres patas de este proyecto político.
- ¿La idea es que de esta Corriente surja el candidato a vicegobernador?
- El candidato a vicegobernador de Scioli lo va a elegir Cristina, pero nosotros creemos que ese lugar tiene que ser para un compañero que exprese este espacio nacional, popular y transformador.
- Pero Scioli ya tiene un candidato a vice que es Baldomero "Cacho" Alvarez...
- No es un mal candidato, Baldomero es el mejor caso de empoderamiento de los humildes. Él llegó con su madre desde Misiones a vivir en las villas de Avellaneda en 1973. Empezó a militar en la villa y llegó a ser intendente. Él me enseñó mucho de política.
- ¿Para el Movimiento Evita las candidaturas están cerradas?
- Para nosotros nuestra candidata a presidente es Cristina y Scioli nuestro candidato a gobernador. Nuestros compañeros están militando eso.
- Le preguntó porque Aníbal Fernández dijo recientemente que las candidaturas no estaban definidas...
- Aníbal puede decir lo que quiera. Yo tengo que ser muy claro con los compañeros del Movimiento.
- D'Elía calificó a Scioli como a un PJ noventista y a Usted como un dirigente social ausente durante la resistencia de los ‘90...
- Son opiniones de D’Elía. Yo no le voy a pegar porque considero que la Federación de Tierra y Vivienda (FTV) fue la organización más grande de América Latina, aunque Luis me diga que no. Yo creo además que este proceso estuvo en deuda con D’Elía, entonces mucha de la bronca que tiene es por esa deuda.
No hemos logrado encuadrar a las organizaciones sociales en este proceso. Hemos cometido errores y también el proceso no está a la altura. Te doy un ejemplo: Pertenecer a una organización social en Bolivia te beneficia para ser candidato, porque la gente te vota y te estima. En Argentina hubo un proceso de estigmatización propio del liberalismo.
- Siempre se dijo que D’Elía decía lo que el Gobierno no podía decir. ¿No cree que en este caso él este diciendo sobre Scioli lo que Cristina no quiere decir?
- No, de ninguna manera. Si Cristina quiere decir algo sobre Scioli no te hagas ningún problema que se lo va a decir ella.
Scioli es un aliado de este proceso. Y un aliado muy leal porque hemos tenido aliados muy leales y aliados que no han sido leales. Nos han acompañado durante un período pero cuando enfrentamos un determinado enemigo se hicieron a un costado. Scioli nos acompañó en todas las batallas y eso tiene un mérito.
Nosotros creemos que en la provincia tenemos que construir un frente a nivel nacional, donde Scioli es parte pero no expresa la totalidad. Yo quiero trabajar con compañeros como Scioli o como Aníbal (Fernández) o como (Amado) Boudou. Aunque yo sea muy diferente a ellos.
- Pero Usted habla de Scioli como aliado. Eso quiere decir que no es parte del proceso…
- No, yo digo que Scioli es aliado del Movimiento Evita. En este proceso, Scioli es tan parte como lo soy yo de este proceso colectivo.
- ¿Martín Sabbatella también es parte?
- Si claro, algunos dirigentes van a ir con Sabbatella. Yo no estoy de acuerdo con todo lo que dice Sabbatella. Yo no soy progresista. Y en eso estoy de acuerdo con D’Elía y no comparto los elementos del progresismo blanco o el progresismo liberal.
- ¿En qué difiere con ese progresismo?
- En que no empodera a los más humildes. El movimiento peronista era la máquina más perfecta en América Latina de empoderar a los trabajadores y a los humildes, por eso era revolucionario. Este proceso kirchnerista no pudo lograrlo y mi objetivo es que el Movimiento Evita sea una herramienta que sirva para eso.
- ¿Considera que Scioli es la derecha de este modelo?
- No, no quiero hablar ni de derecha ni de izquierda, porque si la izquierda es el progresismo blanco yo soy la derecha. Si la izquierda son tantos de los que se identifican como izquierda pero en realidad son liberales de izquierda, ante eso yo soy la derecha de esos tipos.
Yo soy peronista, nacionalista y revolucionario que rompo esos esquemas porque le doy poder a los negros y si le das poder a los negros no sos la izquierda liberal, por el contrario sos la izquierda revolucionaria o como quieras llamarla.
- ¿Pero Scioli empodera a los pobres?
- Es que no es que una persona lo va a hacer. Si yo voy como candidato sacamos 0,5 %. La gente hace cola para votar en contra nuestra.
- ¿Porqué?
- Por que todavía no hemos logrado unir lo social a lo político. La trasformación más fuerte que hizo el enemigo fue una trasformación cultural e ideológica en la que nos robó la política como herramienta de trasformación a los humildes.
En los barrios, la única manera de salir en la situación en la que están es a través de la política, pero la política genuina y no la política punteril de ir detrás de la bolsa de comida. Las organizaciones muchas veces no hemos logrado construir política sana con estos compañeros. Muchas veces ellos son un número más en una movilización y nosotros tenemos que lograr que sean los protagonistas de esa movilización.
- ¿Cree que el kirchnerismo aprendió la lección de la derrota electoral de 2009?
Los kirchneristas somos muy torpes en política (risas). Esto lo charlamos mucho con Néstor (Kirchner). En primer lugar el punto donde habíamos llegado con el modelo. Era un modelo de derrame inducido donde había derrame pero donde llegaba el agua no se generaba un modelo diferente. Había más trabajo y más ingreso. Pero eran ingresos o trabajos sin derechos y cuando hay dificultades es el primer sector que entra en crisis. Ese era el escenario en junio de 2009, hoy es una situación completamente diferente.
- ¿Pero no considera que también hubo errores estratégicos como las candidaturas testimoniales o la elección de los candidatos?
- Eso no nos preocupa. Nosotros no queremos ganar una elección por acertar con una estrategia. Queremos ganar con los votos de la gente que vea que estamos trasformando la realidad. Ya entramos por la ventana en 2003, le ganamos con estrategia a Duhalde.
- Entonces no se descarta que puedan volver a ser torpes…
- Podemos serlo. Pero la ventaja que tenemos es que todo hoy está mucho mejor. Hay gente que en 2009 trabajó en la elección para la oposición y hoy volvieron a estar con nosotros. Ellos aprendieron la lección. Además creo que fue bueno que el electorado nos haya hecho esa advertencia en 2009. Fijate que la profundización más grande de este modelo llegó después de la elección.
- ¿Qué les planteó Kirchner después de esa elección?
- Me acuerdo que fuimos a hablar con Néstor un grupo de dirigentes después de la elección y le planteamos de llegar hasta ese punto con el modelo. Queríamos cuidar lo que teníamos. Néstor nos escuchaba y asentía. Días después apareció con el proyecto de le ley de medios. “Nada de llegar hasta acá”, nos dijo.
- ¿Cuál es su opinión sobre Hugo Moyano al frente del PJ y que análisis hace de los roces que existieron entre el camionero, por un lado, y los intendentes por otro?
- Yo te planteaba recién que hay que darles el poder a los trabajadores y en ese sentido no hay nadie mejor que Moyano para presidir el PJ de la provincia de Buenos Aires. Fue una gran alegría para el Movimiento Evita.
- Pero se está llevando de patadas con los intendentes…
- Bueno, los intendentes van a tener que entender que muchas cosas cambiaron. Sino nunca vamos a avanzar en la idea de empoderar a los trabajadores.
- Sin embargo, lo que le cuestionan a Moyano no es que sea el máximo representante de los trabajadores sino su metodología y su manera de conducir el partido…
- Es la metodología de los trabajadores. Que nos son liberales y cuando se toma la decisión se va para adelante. Es obvio que eso genera ruido, porque también hay intereses del otro lado.
- Usted es platense y apoyó a Pablo Bruera en su llegada a la intendencia. Todo se quebró después de las elecciones de 2009. ¿Qué fue lo que pasó?
- Lo que pasó fue que muchos nos acompañaron a salir del infierno pero nos abandonaron después. Bruera dudó y priorizó su situación personal. No quiso arriesgar su futuro en la pelea contra el campo y la ley de medios. Él quería seguir siendo entrevistado por Todo Noticias.
- Pero el Movimiento Evita sufrió una sangría importante en esa pelea con Bruera. Un funcionario y dos concejales prefirieron quedarse con el Intendente y abandonaron el movimiento...
- Si, pero no importa si eran funcionarios o concejales. Lo importante es que eran compañeros. En mis años de militancia se que hay muchos que están conmigo y que después cruzan la vereda, y quizás después vuelven. Yo tengo fe que muchos de ellos van a volver.
- ¿Cree que Bruera puede ir con la boleta del Frente para la Victoria en las elecciones de octubre?
- Totalmente. Va a ser un candidato a intendente por el kirchnerismo. ¿Qué va a hacer Bruera? Sabe que no tiene otro espacio.
En una entrevista con La Política Online aseguró que les dice a sus compañeros que si alguien “quiere ser concejal o ser funcionario del Gobierno mejor que se sume a La Cámpora donde todos usan traje y hablan bonito, y no al Movimiento Evita”.
Nació en La Plata donde familia fundó la marca de helados Pérsico. A los 14 comenzó su militancia en la UES y más tarde militó en Montoneros. Luego de algunos años de exilio volvió al país para fundar Quebracho y más tarde el Movimiento Evita.
Esquiva críticas hacia Luis D’Elía. Dice que “el kirchnerismo estuvo en deuda” con el titular del Federación de Tierra y Vivienda y “con varios movimientos sociales”.
- ¿Cómo siguen trabajando dentro del kirchenismo sin Néstor?
- Ahora tenemos que hablar mucho más entre nosotros. Cristina conducía el Estado y Néstor conducía el movimiento nacional y lo plantaba al límite de lo posible. Hoy tenemos que construir un Néstor colectivo.
De todos modos creo que Cristina ya demostró que es la jefa política. En la crisis de las tomas de terrenos se manejó mal el uso de la policía y no dudó en tomar cartas en el asunto. Hubo ministros que se enteraron que perdían áreas de su gobierno el mismo día que se anunciaron los cambios. Creo que fueron signos de autoridad muy fuerte de Cristina que demuestran que ella es la jefa de este proceso. Eso es una gran ventaja para nosotros.
- ¿Qué es la Corriente Nacional de la Militancia?
- Es un proyecto que busca institucionalizar el kirchnerismo. Hubo avances en ese sentido, la corriente sindical es parte de esa institucionalización, los jóvenes movilizados son otro espacio que caminan hacia esta institucionalización. Y el espacio de la militancia es otro espacio que deberá marchar en ese sentido. Ahí se conformarían las tres patas de este proyecto político.
- ¿La idea es que de esta Corriente surja el candidato a vicegobernador?
- El candidato a vicegobernador de Scioli lo va a elegir Cristina, pero nosotros creemos que ese lugar tiene que ser para un compañero que exprese este espacio nacional, popular y transformador.
- Pero Scioli ya tiene un candidato a vice que es Baldomero "Cacho" Alvarez...
- No es un mal candidato, Baldomero es el mejor caso de empoderamiento de los humildes. Él llegó con su madre desde Misiones a vivir en las villas de Avellaneda en 1973. Empezó a militar en la villa y llegó a ser intendente. Él me enseñó mucho de política.
- ¿Para el Movimiento Evita las candidaturas están cerradas?
- Para nosotros nuestra candidata a presidente es Cristina y Scioli nuestro candidato a gobernador. Nuestros compañeros están militando eso.
- Le preguntó porque Aníbal Fernández dijo recientemente que las candidaturas no estaban definidas...
- Aníbal puede decir lo que quiera. Yo tengo que ser muy claro con los compañeros del Movimiento.
- D'Elía calificó a Scioli como a un PJ noventista y a Usted como un dirigente social ausente durante la resistencia de los ‘90...
- Son opiniones de D’Elía. Yo no le voy a pegar porque considero que la Federación de Tierra y Vivienda (FTV) fue la organización más grande de América Latina, aunque Luis me diga que no. Yo creo además que este proceso estuvo en deuda con D’Elía, entonces mucha de la bronca que tiene es por esa deuda.
No hemos logrado encuadrar a las organizaciones sociales en este proceso. Hemos cometido errores y también el proceso no está a la altura. Te doy un ejemplo: Pertenecer a una organización social en Bolivia te beneficia para ser candidato, porque la gente te vota y te estima. En Argentina hubo un proceso de estigmatización propio del liberalismo.
- Siempre se dijo que D’Elía decía lo que el Gobierno no podía decir. ¿No cree que en este caso él este diciendo sobre Scioli lo que Cristina no quiere decir?
- No, de ninguna manera. Si Cristina quiere decir algo sobre Scioli no te hagas ningún problema que se lo va a decir ella.
Scioli es un aliado de este proceso. Y un aliado muy leal porque hemos tenido aliados muy leales y aliados que no han sido leales. Nos han acompañado durante un período pero cuando enfrentamos un determinado enemigo se hicieron a un costado. Scioli nos acompañó en todas las batallas y eso tiene un mérito.
Nosotros creemos que en la provincia tenemos que construir un frente a nivel nacional, donde Scioli es parte pero no expresa la totalidad. Yo quiero trabajar con compañeros como Scioli o como Aníbal (Fernández) o como (Amado) Boudou. Aunque yo sea muy diferente a ellos.
- Pero Usted habla de Scioli como aliado. Eso quiere decir que no es parte del proceso…
- No, yo digo que Scioli es aliado del Movimiento Evita. En este proceso, Scioli es tan parte como lo soy yo de este proceso colectivo.
- ¿Martín Sabbatella también es parte?
- Si claro, algunos dirigentes van a ir con Sabbatella. Yo no estoy de acuerdo con todo lo que dice Sabbatella. Yo no soy progresista. Y en eso estoy de acuerdo con D’Elía y no comparto los elementos del progresismo blanco o el progresismo liberal.
- ¿En qué difiere con ese progresismo?
- En que no empodera a los más humildes. El movimiento peronista era la máquina más perfecta en América Latina de empoderar a los trabajadores y a los humildes, por eso era revolucionario. Este proceso kirchnerista no pudo lograrlo y mi objetivo es que el Movimiento Evita sea una herramienta que sirva para eso.
- ¿Considera que Scioli es la derecha de este modelo?
- No, no quiero hablar ni de derecha ni de izquierda, porque si la izquierda es el progresismo blanco yo soy la derecha. Si la izquierda son tantos de los que se identifican como izquierda pero en realidad son liberales de izquierda, ante eso yo soy la derecha de esos tipos.
Yo soy peronista, nacionalista y revolucionario que rompo esos esquemas porque le doy poder a los negros y si le das poder a los negros no sos la izquierda liberal, por el contrario sos la izquierda revolucionaria o como quieras llamarla.
- ¿Pero Scioli empodera a los pobres?
- Es que no es que una persona lo va a hacer. Si yo voy como candidato sacamos 0,5 %. La gente hace cola para votar en contra nuestra.
- ¿Porqué?
- Por que todavía no hemos logrado unir lo social a lo político. La trasformación más fuerte que hizo el enemigo fue una trasformación cultural e ideológica en la que nos robó la política como herramienta de trasformación a los humildes.
En los barrios, la única manera de salir en la situación en la que están es a través de la política, pero la política genuina y no la política punteril de ir detrás de la bolsa de comida. Las organizaciones muchas veces no hemos logrado construir política sana con estos compañeros. Muchas veces ellos son un número más en una movilización y nosotros tenemos que lograr que sean los protagonistas de esa movilización.
- ¿Cree que el kirchnerismo aprendió la lección de la derrota electoral de 2009?
Los kirchneristas somos muy torpes en política (risas). Esto lo charlamos mucho con Néstor (Kirchner). En primer lugar el punto donde habíamos llegado con el modelo. Era un modelo de derrame inducido donde había derrame pero donde llegaba el agua no se generaba un modelo diferente. Había más trabajo y más ingreso. Pero eran ingresos o trabajos sin derechos y cuando hay dificultades es el primer sector que entra en crisis. Ese era el escenario en junio de 2009, hoy es una situación completamente diferente.
- ¿Pero no considera que también hubo errores estratégicos como las candidaturas testimoniales o la elección de los candidatos?
- Eso no nos preocupa. Nosotros no queremos ganar una elección por acertar con una estrategia. Queremos ganar con los votos de la gente que vea que estamos trasformando la realidad. Ya entramos por la ventana en 2003, le ganamos con estrategia a Duhalde.
- Entonces no se descarta que puedan volver a ser torpes…
- Podemos serlo. Pero la ventaja que tenemos es que todo hoy está mucho mejor. Hay gente que en 2009 trabajó en la elección para la oposición y hoy volvieron a estar con nosotros. Ellos aprendieron la lección. Además creo que fue bueno que el electorado nos haya hecho esa advertencia en 2009. Fijate que la profundización más grande de este modelo llegó después de la elección.
- ¿Qué les planteó Kirchner después de esa elección?
- Me acuerdo que fuimos a hablar con Néstor un grupo de dirigentes después de la elección y le planteamos de llegar hasta ese punto con el modelo. Queríamos cuidar lo que teníamos. Néstor nos escuchaba y asentía. Días después apareció con el proyecto de le ley de medios. “Nada de llegar hasta acá”, nos dijo.
- ¿Cuál es su opinión sobre Hugo Moyano al frente del PJ y que análisis hace de los roces que existieron entre el camionero, por un lado, y los intendentes por otro?
- Yo te planteaba recién que hay que darles el poder a los trabajadores y en ese sentido no hay nadie mejor que Moyano para presidir el PJ de la provincia de Buenos Aires. Fue una gran alegría para el Movimiento Evita.
- Pero se está llevando de patadas con los intendentes…
- Bueno, los intendentes van a tener que entender que muchas cosas cambiaron. Sino nunca vamos a avanzar en la idea de empoderar a los trabajadores.
- Sin embargo, lo que le cuestionan a Moyano no es que sea el máximo representante de los trabajadores sino su metodología y su manera de conducir el partido…
- Es la metodología de los trabajadores. Que nos son liberales y cuando se toma la decisión se va para adelante. Es obvio que eso genera ruido, porque también hay intereses del otro lado.
- Usted es platense y apoyó a Pablo Bruera en su llegada a la intendencia. Todo se quebró después de las elecciones de 2009. ¿Qué fue lo que pasó?
- Lo que pasó fue que muchos nos acompañaron a salir del infierno pero nos abandonaron después. Bruera dudó y priorizó su situación personal. No quiso arriesgar su futuro en la pelea contra el campo y la ley de medios. Él quería seguir siendo entrevistado por Todo Noticias.
- Pero el Movimiento Evita sufrió una sangría importante en esa pelea con Bruera. Un funcionario y dos concejales prefirieron quedarse con el Intendente y abandonaron el movimiento...
- Si, pero no importa si eran funcionarios o concejales. Lo importante es que eran compañeros. En mis años de militancia se que hay muchos que están conmigo y que después cruzan la vereda, y quizás después vuelven. Yo tengo fe que muchos de ellos van a volver.
- ¿Cree que Bruera puede ir con la boleta del Frente para la Victoria en las elecciones de octubre?
- Totalmente. Va a ser un candidato a intendente por el kirchnerismo. ¿Qué va a hacer Bruera? Sabe que no tiene otro espacio.
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